Cuenca, 28 de marzo de 2016
He leído con mucha atención la carta que ha hecho pública el Asambleísta por Azuay; Oswaldo Larriva, en esta, se queja de entrada del trato que ha recibido del Presidente Correa, se lamenta de los calificativos usados en su contra como “de desleal, vanidoso y charlatán, que no tengo objetividad en mis actuaciones y pronunciamientos por la leucemia que padezco” nos dice.
Sin duda que su enfermedad no es el tema de esta carta, además no lo critico por ello, más bien le deseo lo mejor, que pueda luchar y ganar a esa maldita enfermedad, para que recupere su salud por su bien y el de su familia.
A lo que me refiero; en esta respuesta también pública, es al aspecto político que el Asambleísta Larriva ha dado en su misiva a los ciudadanos ecuatorianos.
Lamenta, según lo escrito por Larriva de; “el maltrato presidencial del que he sido víctima” y luego continúa con una presunción a modo de excusa, manifestando: “Presumo que los calificativos presidenciales -como explicación posible, no justificación-, provienen de su enojo hábilmente alimentado por personas incondicionales de su entorno, que no le dicen la verdad y le presentan sus versiones distorsionadas sobre mi defensa de los intereses del país y sobre todo de una provincia digna a la que represento: el Azuay”
Estas frases y palabras que ha indicado el Asambleísta Larriva es lo que provocó esta respuesta.
Sr. Larriva, usted al igual que su compañero el Asambleísta Fernando Bustamante, han sido cómodos, pero sobre todo cómplices de tanto abuso, insulto, desprecio y violación de derechos humanos que el presidente ha provocado desde el 2007 hasta la fecha, ustedes, mirando la situación política actual se quieren lavar las manos cual Poncio Pilatos, queriendo alejarse de lo que Correa ha venido haciendo sistemáticamente y aplaudían en las sabatinas sin un mínimo de pudor o vergüenza por lo que hacía el presidente.
Le increpo con respeto Sr. Larriva, pero sin consideración política por su hipocresía al deslindar su co-responsabilidad ante la situación violenta e insostenible que vivimos.
Se llena de valor para decir que ha sido una víctima de los insultos presidenciales, más sin embargo, NUNCA le he escuchado defender la honra de todos aquellos que con valentía hemos enfrentado al presidente Correa y él, fiel a su violento y déspota comportamiento, ha destrozado vidas, familias, liquidado la honra de ecuatorianos y ecuatorianas de bien y usted, más decenas de asambleístas sumisos, temerosos y pávidos han brillado por su silencio cómplice ante tamaña injusticia!
Usted Asambleísta Larriva, grita a los cuatro vientos que “no me callaré ante mofas, burlas, agravios e improperios aunque provengan de la máxima autoridad de la República” pues si lo ha hecho Asambleísta y no tiene la calidad moral para decir que solo su dignidad y su honor valen, cuando la cientos de ecuatorianos ha sido destrozada por el presidente Correa y usted no dijo nada, otra cosa sería si usted desde su posición como asambleísta de Alianza País hubiera alzado la voz en contra del presidente para defender la honra de ecuatorianos decentes que fueron burlados, insultados y agraviados desde Carondelet, lo suyo es un triste espectáculo de saltar de un barco que se hunde y no quiere irse con él.
Sr. Larriva, usted se lamenta que en Carondelet al Presidente, ” no le dicen la verdad y le presentan sus versiones distorsionadas” yo lo dije en el 2007 que Correa tiene un círculo de poder que no le permite tener la información correcta, sin embargo, cuando el presidente me insultó, calumnió y trató de pulverizar mi honra, usted se mantuvo callado, y así ha sucedido en tantas otras ocasiones que me enfrenté a la barbarie presidencial, solo por mi labor de decir la verdad, pedir justicia o solicitar que cumplan con su trabajo o lo ofrecido, así que sus lamentos no los puedo aceptar y mucho menos congraciarme de su débil carácter y oportunismo.
Sr. Larriva, lo que más le conviene al país, si usted realmente quiere la verdad y la justicia, si quiere realmente servir a los Azuayos y Ecuatorianos, debería iniciar una verdadera fiscalización de sus compañeritos, y presentar las denuncias correspondientes en la Fiscalía y Contraloría sobre tantas irregularidades, presentando al país los nombres y apellidos de los involucrados directos, caiga quien caiga y que usted conoce, y solo sugiere tímidamente en su carta, por lo menos usted tiene inmunidad, el resto solo tenemos el valor y la entereza para enfrentar la intolerancia, de no hacerlo, son solo palabras que se las lleva el viento, en tal caso Sr. Larriva, con todo el respeto del mundo que se merece su familia, es mejor que renuncie a su curul y disfrute de la compañía de sus seres queridos, porque para político y representante de los Azuayos y Ecuatorianos que somos valientes, nos falló y mucho!
Por la verdad y justicia
William Murillo Vera. .
Ecuatoriano. .
Ex. Ministro de migrantes .
Fundador del movimiento Yo Soy Ecuatoriano.
